La Disfagia es un trastorno de la deglución que se caracteriza por la dificultad de tragar alimentos, tanto sólidos como líquidos.  Puede ser por razones orgánicas (como enfermedades oncológicas) o de origen neurológico (como las derivadas de un ictus o de la enfermedad de Parkinson). Es un problema que puede afectar a cualquier edad.

¿Cómo detectamos la Disfagia?

• Existe una necesidad de realizar varios intentos para tragar
• Tos durante o después de las comidas
• Fiebre sin causa aparente
• Sensación de atragantamiento o nudo
• Pérdida de peso
• Babeo
• Molestias en la garganta (carraspeo)

¿Cómo comer cuando se tiene Disfagia?

• Preparar los alimentos triturados, para que tengan una textura uniforme. Evitar los grumos.
• No usar pajitas ni jeringas.
• Utilizar siempre cucharas pequeñas, es más fácil tragar en pequeñas cantidades.
• No comer con cansancio o malestar.
• Utilizar espesantes para los líquidos.
• Utilizar posturas correctas: postura sentada, espalda apoyada y recta y la cabeza alineada (se pueden utilizar cojines). Si tiene que comer en la cama el cabecero tiene que estar elevado a 90º y se debe mantener sentado o incorporada a la persona en la cama al menos 30-60’ minutos tras las comidas y mantenerlo algo incorporado para una buena digestión.

¿Qué hacer después de las comidas?

• Comprobar que no han quedado restos alimenticios en la boca.
• Realizar una buena higiene bucal.
• No acostar al paciente hasta pasados 30-60 minutos y mantenerlo algo incorporado para facilitar la buena digestión.

¿Qué nos puede ocurrir si sufrimos disfagia?

• Que nos bajen las defensas y tengamos mayor riesgo a enfermar, debido a una mala nutrición.
• Suframos deshidratación, al beber menos o al tener miedo a beber.
• Riesgo a que ocurra una infección, debido a la aspiración de los alimentos a los pulmones.
• Malnutrición.
• Decaimiento, estado de ánimo bajo, pérdida de fuerza.

PAUTAS IMPORTANTES DURANTE LA COMIDA

• No hablar mientras se come, así nos concentramos más en la deglución.
• No distraerse con cosas mientras se come, ejemplo viendo la televisión.
• Trocear la comida en trozos pequeños y las cucharadas pequeñas.
• Hay que evitar los alimentos que tienen migajas o que puedan dejar algún resto.
• No mezclar texturas diferentes de alimentos.
• Es importante el uso de espesantes, con los que se espesaran siempre el agua y las bebidas en las medidas que haya indicado el personal sanitario.

Isabel Tarifa (Trabajadora Social de Atencis)