agosto 19, 2021

La fractura de cadera representa una de las patologías más frecuentes en las personas mayores. Con el paso de los años aumenta la probabilidad de sufrir una caída, como consecuencia de enfermedades como la osteoporosis, fragilidad o deterioro funcional. Normalmente, la consecuencia de dicha caída es la fractura de cadera.

Las operaciones de cadera en personas mayores se hacen para sustituir una articulación dañada por una sana (con una prótesis), lo que le permitirá al paciente anciano poder llevar una vida plena y activa, así como recuperar la movilidad perdida.

Las operaciones de cadera en personas mayores para colocar una prótesis son cirugías que tienen como principal objetivo mejorar la calidad de vida de los ancianos, así como eliminar el dolor que puede que sufran durante mucho tiempo, y a la vez, que puedan recuperar la movilidad perdida.

La colocación de una prótesis de cadera en ancianos se trata, según los expertos, de una de las operaciones más seguras y con mayores garantías de éxito.

De igual modo, hay que saber que no existe en la actualidad un límite de edad en sí mismo para la realización de una operación de cadera en ancianos y personas mayores.

Consejos para el cuidado de una persona con rotura de cadera

Tras la operación se debe intentar fortalecer los músculos situados alrededor de la cadera y realizar ejercicios moderados para recuperar su movilidad. Los ejercicios de rehabilitación son fundamentales y deben practicarse en casa de forma regular, para recuperar el uso de la articulación de la cadera.

El objetivo de la operación de cadera en personas mayores es implantarle una prótesis para que el paciente recupere su movilidad y vida normal sin dolor.

Para ello, se recomiendan estos consejos básicos hasta la completa curación y la cicatrización de la herida:

  • Se aconseja dormir durante los tres primeros meses en posición supina (boca arriba). Si el paciente se acuesta de lado, con la parte operada en posición superior, debe colocar una almohada grande entre las rodillas.
  • No se debe doblar la cadera operada más de 90°.
  • Se debe salir /entrar en la cama solo por el lado operado.
  • No se deben cruzar las rodillas ni los pies, tanto si ese está sentado, acostado o de pie.
  • No hay que girar la pierna operada ni hacia adentro ni hacia afuera.
  • Debe optar siempre por la ducha y evitar la bañera, dado que la bañera presenta un riesgo mayor de resbalones y dislocaciones.
  • El paciente debe llevar siempre zapatos cerrados, resistentes y con suela que se agarre suficientemente al suelo.
  • Si el paciente tiene que subir escaleras, debe mantener siempre una mano en la barandilla.

El tipo de cirugía dependerá del tipo de fractura. Se recomienda siempre la cirugía reparadora. En este caso, se utiliza fijación interna (clavos, tornillos o varillas) que se colocan en el hueso fracturado para fijarlo. En otros casos, será necesaria la cirugía de reemplazo. Consiste en el cambio de parte o la totalidad de la cadera por una prótesis. En cada persona el tiempo de recuperación será distinto.

La cirugía de fractura de cadera o la colocación de una prótesis, podría tener unos riesgos, sobre todo, cuando se trata de personas en edad avanzada:

  • Infección
  • Aparición de hematomas.
  • Hemorragias.
  • Cambio en la longitud de la pierna.
  • Luxación.

Si no surgen complicaciones, la recuperación debe realizarse lo antes posible para evitar entumecimiento de la zona. A continuación te contamos cómo se realiza la rehabilitación de la fractura de cadera.